María
es una niña muy dulce cariñosa, y no se nos ocurrió hacer nada más distinto que
un jardín florido.
Los
colores variados y un estilo patchwork,
ha predominado en ese 3º cumpleaños.
La
mesa dulce, tiene como punto central la gran torre de Cupcakes de vainilla con cobertura de ganache de chocolate blanco, que de esa vez
substituye el pastel. Nuestras trufas,
de coco, chocolate y fresa, formaban el césped florido del jardín de galletas y
cakepops de vainilla.
Como
detalle para los invitados, además de las cookies-piruletas, pequeños vidrios de caramelos decorados y
tubos rellenos de “lacasitos” complementaban la decoración.
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